viernes, 30 de septiembre de 2011

5. Acoso.

      Iyiring es tan tonto a veces, bueno, más bien la mayoría de las veces, pero que le vamos a hacer, es un diablillo.
    -Seguro que es como: ¿Cuál diría el otro que es el que apuñala? – Dijo él.
    -¡Imbécil! ¡Eso no serviría de nada, y si se lo dices al que apuñala, pierdes! – Respondió una tal Lisa, insultando como siempre.
      Ella es bastante simpática normalmente, pero se cree tan superior a los demás, y odia a Iyiring, así que ya ven.
     -Y si dices ¿Cuál es la buena? – Propuso alguno- Habría 66.6% de que te digan la correcta.
     -¡Pero no se vale adivinar! Además de que quien dice que el tercer guardia diría la verdad, probablemente no lo haría. – Dijo Lisa con tono condescendiente. No estaba de muy buen humor aquel día.
      Entre tanta discusión Nacho ya no tenía idea de que se le había perdido allí. Estaba parado incómodamente en el medio de la habitación y miraba con miedo a su alrededor. Lentamente comenzó a escabullirse en dirección a la puerta intentando no ser visto para poder huir a algún lugar tranquilo.
     -¡Oigan! –Grite yo -¡El pobre se nos escapa! Vamos a terminar resolviendo el reto sin él, y así nunca sabremos si lo hicimos bien.
      Sabía que él estaba muy incómodo, pero yo quería ayudarlo. Más lejos del centro de la ciudad las cosas se tornan bastante extrañas. Nuestro pequeño bar era un lugar bastante particular en el infierno y en mi opinión el mejor lugar al que pudiese haber llegado nuestro hombre. Me acerque a él y le dije que se sentara, pregunte su nombre y si es que quería algo. Le traje un café.
    -Bueno, bueno, todos vimos el desafío que te dieron, y queremos resolverlo, o ayudarte a hacerlo. –Explique –Ahora calmémonos y pensemos. El reto del que deriva este se respondía con “¿Qué puerta diría el otro que es la mala?”, y de esa manera cualquiera de los guardias, el que miente o el que dice la verdad, apuntaría hacia la puerta buena. Ahora hay tres guardias, y del tercero no sabemos mucho. Puede que él diga la verdad, o puede que mienta, probablemente es cosa de él. Siento que la solución recae en ese guardia.
     Iyiring ya se estaba aburriendo  y decidió que yo ya había hablado demasiado y me interrumpió.
   -¿Y cómo moriste?
     De repente esa típica pregunta comenzó a resonar desde todos los lugares de la cantina (que por cierto, no suele tener más que 10 personas) y yo ya iba a callar a todos, pero Nacho quiso responder la pregunta y hablo de una manera que yo no me imaginaba hasta entonces. Nos contó la historia que yo les conté a ustedes hace un rato, y de ahí en adelante no paro de hablar. Siento que fue el café que le di que lo hizo cambiar. Probablemente fue el café.

jueves, 29 de septiembre de 2011

4. Desafío

Nacho debió haber llegado con un guardia, quien le dijo que se le condenaba por herejía (que precisamente acapara a casi todos los condenados), cuál era su castigo y si optaba por desafiar a la muerte. Después de responder afirmativamente fue llevado a la gran Arena Inferno en donde la muerte actual lleva acabo los duelos. Considerando la gran cantidad de gente que muere y va al infierno, numerosos ayudantes trabajan a toda hora aplicando estos desafíos, normalmente poco publicitados, pero la muerte constantemente toma a gente poco afortunada para enfrentarlos personalmente, y esos son los casos en que se arma todo un show que acapara toda la atención del limbo (o al menos debería hacerlo, según lo que quiere la muerte (pero en realidad lo hace bastante bien, así que no sé a quién engaño)). Usualmente aquellos eventos vienen acompañados de un nuevo e innovador desafío, que normalmente solo es una estupidez poco obvia que se le ocurrió a la tipa por ahí.
     El reto que le fue asignado a nuestro hombre no tardó en hacerse conocer por todo el limbo, gracias a la gran publicidad televisiva. La muerte humilla más a los ateos, aunque en realidad, casi  todos los que van al infierno son ateos, así que la humillación fue pura mala suerte. La supuesta humillación.
     Derivado del famoso acertijo del laberinto con dos puertas y dos guardias, una puerta a la muerte y la otra a la libertad y uno de  los guardias mentía siempre, mientras que el otro decía la verdad todo el tiempo. El de Nacho era como este, pero con 3 puertas, una que llevaba a la vida, y 3 guardias, los dos de siempre y un tercero, que apuñala y subsecuentemente lleva a su condena a la gente que le haga preguntas complicadas. ¿Cuáles son preguntas complicadas para él? Nadie lo sabe, probablemente sería su propio juicio. Por ultimo cabe destacar que las puertas no van asociadas a ningún guardia en particular, o sea, adivinar el guardia no te permite saber que puerta es la que está detrás de él. Ah y no se puede adivinar, hay que estar 100 % seguro de la respuesta correcta. El que intenta adivinar se va derechito a su condena.
    La muerte que invento el desafío original era muchísimo más profesional y nunca hizo de sus retos un show, pero la muerte actual le dio un giro a toda la institución y convierto esta tradición milenaria en un método de entretenimiento. De esta manera las respuestas no demoraban mucho en hacerse conocidas en todo el limbo, y terminaban por llegar a la tierra, por lo que constantemente tiene que ir inventando nuevas maneras de humillar a los recién muertos, especialmente a los ateos, y lamentablemente no es muy original. Esta demás decir que no era una figura muy querida por los muertos, pero altamente aclamada por la mayoría de los diablillos.
    Nacho tenía 24 horas antes de responder, tiempo durante el cual podía vagar libremente por el limbo.
    Yo estaba en Ishmail’s cuando la vieja tele anuncio el desafío en cadena, bueno, en realidad es el único canal (según la muerte). Todo el día anuncia distintos desafíos, todos bastante estúpidos y aburridos por lo imposible. Cierto diablillo de nombre Iyiring que suele pasarla con nosotros llamo nuestra atención hacia la pantalla con un quejido.
  -¡No se le ocurre nada nuevo a esta! Miren lo que hizo ahora.
  -¡Oh! ¡Que original! – Dijo sarcásticamente el dueño del lugar: Ishmail. – Es como ese de los dos guardias, pero con tres.
  -Suerte que tenemos fairy. – Dije yo.
   Ninguno de los chistes fue muy bueno, pero uno que otro por ahí se rio. Lo bueno del infierno, por cierto, es que no hay ley de copyright, lo malo, es que no hay ley de copyright, y eso porque aunque los habitantes del limbo deben tener libertad, los diablillos son autoritarios y controlan todo lo que pueden, y ciertamente no quieren tener que dejar de robar los inventos de los demás. Bueno que va, el Diablo los respalda (Supuestamente).
   -Un champote gratis para el que resuelva el acertijo, yo creo. – Dijo Iyiring.
    Los champotes son alfajores dobles cubiertos de chocolate, la especialidad de Ishmail. El mismo dejo de cantar hits de Lady Gaga para responder que le parecía razonable la idea del diablillo (Existen vías de contacto entre la tierra y el infierno, aunque no son muy licitas). Enseguida desplego sus alas y salió volando en dirección a la Arena Inferno, en cuya salida se encontraba Nacho Flores totalmente desconcertado y asustado. Iyiring simplemente lo agarro y voló de vuelta con el (Son muy fuertes los diablillos, desafortunadamente para todo el resto de los habitantes de aquí). Entro al bar, perdón, cantina, con Nacho en brazos, y lo dejo en el centro del lugar.
  -Veamos… - Comenzó Iyiring.

miércoles, 28 de septiembre de 2011

3. Comentario.

     Todo aquello fue bastante extraño. La determinación, o más bien la fuerza de voluntad, y el valor de seguir caminando estando prácticamente seguro de su muerte. El Nacho que conocemos no mostraba ese tipo de atributos, o al menos los escondía muy bien y por eso ninguno de nosotros entiende muy bien como un tipo tímido como él se mató tratando de superar a pie la distancia recorrida por motos, aunque claro, puede ser esa la razón. Quizás un tímido solamente encierre más voluntad que cualquiera. En todo caso, la personalidad de nuestro hombre fue más bien cambiante en el poco tiempo en que pudimos conocerlo, y aunque es tímido, es capaz de acostumbrase a las personas y mostrar como en realidad es. También pudo haber pensado que estaba soñando.
     Muchas hipótesis surgieron entre quienes conocimos su historia sobre cuál fue la verdadera razón de aquella acción tan precipitada y, bueno, estúpida. La más popular hasta ahora es la “Teoría del asesinato”, que sigue en constante discusión. Supuestamente, aquel hombre tímido en realidad es un sicópata, y habría asesinado a alguien antes de salir corriendo hacia el desierto, lejos de la policía. Otros dicen también que no necesariamente Nacho es un sicópata o loco, sino que tuvo alguna razón algo justificable para cometer aquel crimen, preferiblemente algún problema amoroso, pero el mito va desde deudas hasta un asesinato por encargo. La hipótesis del asesinato por problemas de pareja es en realidad, la hipótesis con más base real que cualquier otra (aunque todavía bastante vaga). Podría decirles cual es esa “base” ahora, pero para la narración, conviene hacerlo en su momento.
    Otros dicen que pudo simplemente haber estado harto del mundo, y fue al desierto a suicidarse. Otra vez resaltan los problemas de pareja como causa de su muerte, y la hipótesis del suicido tiene bastante aceptación, ya que parece bastante obvia. Después de esa esta la teoría de la locura, espontanea o no (porque ya he mencionado por ahí que algunos dicen que podría tener esquizofrenia), lo que tampoco sería tan difícil de imaginar, especialmente considerando su explicación, es una cosa bastante obvia que pensar.
     Entre otras hipótesis esta la del control de mente, la de que unos terroristas o guerrilleros o aliens o traficantes lo botaron ahí, y cualquier cosa que se le pueda ocurrir a un diablillo, que en cuanto a muertes, son muchas.
     Que conste que el lugar, la hora y la manera de su muerte son definitivas y concretas, porque se registran automáticamente al morir alguien en nuestros archivos, por eso todas las hipótesis giran alrededor de la muerte en el desierto, y a nadie se le ocurre decir que el simplemente mintió sobre su muerte (Me pareció que debía aclarar ese punto).
     Nacho Flores murió en el desierto y al ser un ateo bautizado, llego al infierno. Eso me recuerda a mi muerte. La muerte es algo de lo más raro, es todo un hito, que uno siempre recordara, a diferencia del nacimiento, que los vivos consideran el hito más importante. Aquí en el limbo, celebramos la fecha de muerte como cumpleaños, no la de nacimiento, pero eso es bastante lógico, al ser el momento en donde llegamos a cada una de las existencias.
     Yo morí de un disparo en el corazón en una guerra o algo, no recuerdo bien y será porque lo que vino inmediatamente después fue más importante para mí que cualquier otra cosa que haya experimentado. Al principio dolió muchísimo, y sangre mucho también. Recuerdo claramente la tibia sensación de mi sangre. Fue la única vez en que sangre tanto como para sentirla, pero tanto el dolor como aquella sensación de calor desaparecieron en unos dos o tres segundos después del disparo, cuando perdí la conciencia. Otros segundos más pasarían hasta que fui capaz de ver mi cuerpo ensangrentado yaciendo sin vida en el piso. Me hundí rápidamente y llegue aquí en poquísimo tiempo (esta zona del infierno esta justo por debajo de la superficie). Mis padres eran ateos, y no recibí educación religiosa (formalmente, no me bautizaron). Por lo tanto, al llegar aquí, el guardia de turno me explico que había muerto y estaba en el infierno. Al no haber estado en contacto con dios, no recibía mas condena que tener que estar en el limbo por el resto de la eternidad (o eso es lo que dicen), con plena libertad de acción. Claro que eso ultimo no siempre se cumple, pero se cumple mucho menos allá arriba en la tierra, ya que aquí al menos sé que no moriré si no como ni duermo. Yo no quise jugar con la muerte, como hace la mayoría, pensando que era simplemente imposible ganarle, y quería ahorrarme la humillación. Trataba de hacerme creer que esto era un sueño, mientras me fui acostumbrando a la vida en este lugar, y me di cuenta que no estaba durmiendo. Ahora me arrepiento de no haber desafiado a la muerte, sabiendo que es posible derrotarla. Yo creo que hubiera tenido alguna oportunidad de hacerlo.
    Y ya me desvié suficiente del tema. Nacho pasó por un proceso diferente, porque, aunque él también era ateo como yo, si fue bautizado por sus padres y por tanto le correspondía el castigo del sexto circulo, nada más y nada menos que pasar la eternidad en un ataúd en llamas. Ante tal castigo, nadie se negaría a una última oportunidad de salir de ahí, aunque sea enfrentando a la mismísima muerte.

martes, 27 de septiembre de 2011

2. Muerte.

     La historia ocurrió no mucho antes del día en que escribo esto. Fue hace solo unas semanas, quizás un mes, siempre me confundo.
     En ese entonces Nacho Flores se encontraba recorriendo un desierto. Estaba solo, como es normal en él. Le gusta estar solo. Tenía la determinación de llegar lo más lejos posible, sin ningún tipo de equipamiento ni comida, ni siquiera algún líquido.
     Específicamente, quería llegar más allá de lo que había llegado antes, y en lo posible, más allá de las interminables marcas de ruedas de motos, de dos y cuatro ruedas, que constantemente se paseaban en libertad por las arenas de Atacama. Tenía cierto desprecio contra esas motos. Detestaba la manera en que llegaban tan fácilmente a aquellos lugares donde el apenas llegaba después de mucho esfuerzo, e incluso más lejos, alejándose de la civilización.
     Pero aquel día, estaba decidido. Camino bajo el sol calcinante del desierto más árido del mundo. Camino hasta que ya le pareció que era hora de volver; estaba en el punto más lejano al que había llegado jamás, pero todavía las malditas ruedas le daban un diseño especial a aquel paisaje desolado. No tan imponente como antes, pero todavía tenían bastante presencia.
     En este punto la sensación de sed ya había entrado por su boca, se había arrastrado por la lengua llegando hasta el fondo de la garganta, y a través de los nervios atacaba al cerebro con fuerza. Pero ni el mismo Nacho entiende cómo es posible que él no haya decido volver en ese punto, que parecía ser su última esperanza, o llamar a alguien. Pero no, el siguió, paso a paso, huella tras huella, izquierda, derecha, izquierda, derecha. Camino incluso hasta el anochecer, en algo que parecía humanamente imposible. Lo triste es que siempre, dentro de su rango de vista, hubo alguna que otra huella de moto aventurera que anunciaba que alguien había estado allí antes, y con mucho menos esfuerzo. Ya en este punto nuestro hombre sabía que iba a morir, y supongo que por eso decidió que no valía la pena detenerse.
     Pero pese a esa voluntad sobrehumana que había demostrado hasta aquel momento, eventualmente su cuerpo, completamente carente de energía, calló. Agotado, exhausto, muerto.

lunes, 26 de septiembre de 2011

1. Introducción

     Vive hoy (y vivía ayer) un hombre a quien llaman Nacho Flores. A diferencia de la mayoría de los hombres que viven en este momento, él no ha vivido todos los días desde su nacimiento. Nacho logró derrotar a la muerte en un desafío, y por eso ahora podemos decir que, por un periodo de poco más de un día, Nacho Flores no estuvo en este mundo.
     Pero que conste que nuestro hombre (así nos gusta llamarlo) no es el único que ha logrado vencer a la muerte. Adán pudo derrotar a la muerte casi 100 veces. Antes de que la muerte se impusiera ante él en un juego de gato, Adán había vivido por más de 900 años, o al menos eso dice la Biblia, y si lo dice un libro, hay que creerlo.
     La verdad es que muchos de los habitantes del limbo dudamos de la veracidad de la Biblia (en ciertos puntos, claro está), especialmente en las cosas más antiguas. Y no digan que es porque todos éramos ateos en vida, ya que este escepticismo se extiende hasta aquellos habitantes que son oriundos de aquí, los diablillos. Simplemente se escribió hace mucho tiempo y por personas, y de toda la vida hemos esperado la corroboración de Dios o del Diablo, pero bien se sabe que jamás lo harán.
     Además de Nacho y de Adán, Paul McCartney, el bajista de los Beatles, le gano a la muerte después de morir en un accidente de moto, ahí por el 65. Esto origino el mito de que Paul McCartney había muerto, pero ya que los Beatles estaban en uno de sus mejores momentos, decidieron no anunciarlo y en vez de eso  lo  reemplazaron por un doble, llamado William Shears Campbell, y supuestamente escondieron pistas en las letras de sus canciones, y portadas de sus álbumes, que revelaban todo el asunto. Puras tonterías, pero así es la gente, el cerebro ve lo que quiere ver, cuantas veces se ha dicho.
     Pero ya veo que me voy desviando, y esto es solo una introducción a la historia de nuestro hombre. Les cuento la historia, principalmente porque el desafío que Nacho tuvo que superar fue de una dificultad increíble, pero aún más increíble fue la manera en que él pudo ganarlo, y por supuesto, reírse en la cara de la muerte. Aquí está la historia.